Quisiera tener perspectiva
En los 29 años que hasta ahora llevo vividos, la escasa experiencia que todavía tengo en la mayoría de los importantes temas de la vida me dice que raramente te encontrarás un día que te marque para siempre. Normalmente se trata de procesos que tienen lugar durante un cierto período de tiempo más o menos grande. Pueden ser un par de días, tres, una semana, varios meses, varios años ... o toda una vida. De todas formas, cualquiera que sea el proceso en el que estés inmerso, es francamente difícil dar un paso hacia afuera, ver las cosas con objetividad y analizar cómo y en qué va a cambiar tu vida. Normalmente eso sólo ocurre cuando ha transcurrido un cierto tiempo y puedes ver las cosas con perspectiva. A veces ni así.
Recuerdo, como todo el mundo, días memorables que lo fueron por ellos mismos, o porque alguien decidió que debían serlo ( léase un bautizo, una comunión, el primer día en el instituto, en la universidad, el día de la graduación, el primer día de trabajo ... ). Ése puede ser el primer paso y a veces es medio camino, pero sin duda, algo que cambia/marca tu vida, se suele desarrollar de forma más lenta y casi diría que inevitablemente, sin nuestro conocimiento consciente.
Recuerdo ahora los años de EGB con la "Señorita Manoly", aquella fantástica profesora que realmente sentía la vocación docente y que sin duda tiene mucha parte de culpa en que yo ahora sea como soy. Baste como dato que para corregir mi ilegible letra de médico, urdió un plan junto a mis padres. Ella me amenazaba con no darme las notas si yo no mejoraba la letra. Mis padres me amenazaban con no firmar las notas (que no me iban a entregar si no mejoraba la letra). La letra mejoró algo ... pero sólo algo. Intentaron un imposible.
---------- Abre Kit Kat
Lo de mi letra tiene su miga, en una exposición de cuentos infantiles fui el único autor cuyos cuentos iban "doblados" por algunas de las más bellas caligrafías de la clase, que por cierto, a su vez se correspondían con algunos de los más bellos rostros de la clase. Sólo dejaron uno escrito por mí para que al menos alguno llevara mi particular sello.
---------- Cierra Kit Kat
Recuerdo también mis años de instituto, Fernando en primero con el que jugaba al 4 en raya y luego el trienio de los 4 magníficos y el expediente casi impecable con el que mi tío presumía de sobrino estudiante ante los compañeros de trabajo.
Luego llegó la Universidad, donde aprendí/perfeccioné la analítica forma de pensar que caracteriza, o al menos debiera, a un matemático. Durante ese tiempo conocí además la muerte en la familia, primero mi tía y mi abuelo. Tres años después mi tío. Ya me gustaría que la cosa quedara ahí, pero la vida tiene la mala costumbre de no hacer lo que queremos.
Los arriba expuestos son sólo tres ejemplos de procesos, en este caso educativos, que marcan a la persona. No estoy seguro de cómo me han marcado el primero y el segundo, pero parece obvio que ellos, tal y como sucedieron, hicieron posible el tercero.
Y todo esto, ¿a cuento de qué?. Pues todo esto a cuento de que hoy ha sido de nuevo el primer día de colegio o de instituto o de trabajo. Hoy he ido por segunda vez a un notario. La primera fue para el préstamo del coche. Ese préstamo lo pagué en tiempo récord ... fruto de las horas extras récord que nos tocaron en suerte y que supusieron que de mis 29 años, uno pueda considerarse como prácticamente perdido. De la casa al trabajo, del trabajo a la casa, a mal dormir y a volver a empezar. El préstamo, mejor dicho, el empréstito que hoy he firmado, no voy a poder pagarlo tan pronto, ni siquiera si volvieran, Dios no lo quiera, tiempos como aquéllos.
Hoy he firmado una hipoteca y sus efectos sobre mi vida sólo serán perceptibles con algo de perspectiva. Quisiera tener ésa perspectiva y saber si he hecho bien, o mal o regular, si elegí el mejor banco, la mejor hipoteca, el mejor piso ... o quizás sólo algo aceptable ... o quizás la he cagado. Quisiera tener ésa perspectiva, pero no la tengo. Es uno de los alicientes de la vida y la gente que como yo gusta de controlar su vida con el resultado de que casi nunca pasa nada, a veces tiene que embarcarse. Yo lo acabo de hacer.
Un saludo, Domingo.
P.D. Al igual que celebré el día de mi cumpleaños en el CRTS, hoy para celebrar la de obras que tengo que hacer, me he ido a donar sangre. Donación 57. Esperemos que pueda seguir haciéndolo con la misma puntualidad que el banco me reclamará la cuota los días 14 de cada mes.
Recuerdo, como todo el mundo, días memorables que lo fueron por ellos mismos, o porque alguien decidió que debían serlo ( léase un bautizo, una comunión, el primer día en el instituto, en la universidad, el día de la graduación, el primer día de trabajo ... ). Ése puede ser el primer paso y a veces es medio camino, pero sin duda, algo que cambia/marca tu vida, se suele desarrollar de forma más lenta y casi diría que inevitablemente, sin nuestro conocimiento consciente.
Recuerdo ahora los años de EGB con la "Señorita Manoly", aquella fantástica profesora que realmente sentía la vocación docente y que sin duda tiene mucha parte de culpa en que yo ahora sea como soy. Baste como dato que para corregir mi ilegible letra de médico, urdió un plan junto a mis padres. Ella me amenazaba con no darme las notas si yo no mejoraba la letra. Mis padres me amenazaban con no firmar las notas (que no me iban a entregar si no mejoraba la letra). La letra mejoró algo ... pero sólo algo. Intentaron un imposible.
---------- Abre Kit Kat
Lo de mi letra tiene su miga, en una exposición de cuentos infantiles fui el único autor cuyos cuentos iban "doblados" por algunas de las más bellas caligrafías de la clase, que por cierto, a su vez se correspondían con algunos de los más bellos rostros de la clase. Sólo dejaron uno escrito por mí para que al menos alguno llevara mi particular sello.
---------- Cierra Kit Kat
Recuerdo también mis años de instituto, Fernando en primero con el que jugaba al 4 en raya y luego el trienio de los 4 magníficos y el expediente casi impecable con el que mi tío presumía de sobrino estudiante ante los compañeros de trabajo.
Luego llegó la Universidad, donde aprendí/perfeccioné la analítica forma de pensar que caracteriza, o al menos debiera, a un matemático. Durante ese tiempo conocí además la muerte en la familia, primero mi tía y mi abuelo. Tres años después mi tío. Ya me gustaría que la cosa quedara ahí, pero la vida tiene la mala costumbre de no hacer lo que queremos.
Los arriba expuestos son sólo tres ejemplos de procesos, en este caso educativos, que marcan a la persona. No estoy seguro de cómo me han marcado el primero y el segundo, pero parece obvio que ellos, tal y como sucedieron, hicieron posible el tercero.
Y todo esto, ¿a cuento de qué?. Pues todo esto a cuento de que hoy ha sido de nuevo el primer día de colegio o de instituto o de trabajo. Hoy he ido por segunda vez a un notario. La primera fue para el préstamo del coche. Ese préstamo lo pagué en tiempo récord ... fruto de las horas extras récord que nos tocaron en suerte y que supusieron que de mis 29 años, uno pueda considerarse como prácticamente perdido. De la casa al trabajo, del trabajo a la casa, a mal dormir y a volver a empezar. El préstamo, mejor dicho, el empréstito que hoy he firmado, no voy a poder pagarlo tan pronto, ni siquiera si volvieran, Dios no lo quiera, tiempos como aquéllos.
Hoy he firmado una hipoteca y sus efectos sobre mi vida sólo serán perceptibles con algo de perspectiva. Quisiera tener ésa perspectiva y saber si he hecho bien, o mal o regular, si elegí el mejor banco, la mejor hipoteca, el mejor piso ... o quizás sólo algo aceptable ... o quizás la he cagado. Quisiera tener ésa perspectiva, pero no la tengo. Es uno de los alicientes de la vida y la gente que como yo gusta de controlar su vida con el resultado de que casi nunca pasa nada, a veces tiene que embarcarse. Yo lo acabo de hacer.
Un saludo, Domingo.
P.D. Al igual que celebré el día de mi cumpleaños en el CRTS, hoy para celebrar la de obras que tengo que hacer, me he ido a donar sangre. Donación 57. Esperemos que pueda seguir haciéndolo con la misma puntualidad que el banco me reclamará la cuota los días 14 de cada mes.
posted by Domingo at 11/14/2005 09:03:00 p. m.
7 Comments:
Ya te lo dijo en el primer comentario que te dejé y ahora lo vuelvo hacer. Tu blog engancha, porque las palabras llevan el misterio de la vida. Les una frase e te intentas imaginar en la misma situación del que escribe. Es como un puro diario, pero bien redactado y hecho.
Tu vida ha tenido esas etapas que nombras y aún te quedaran más. Vivimos esperando por un coche nuevo, una piso, terminar la carrera y cuando lo conseguimos, decimos: ! ya esta ¡ ya ¿ ahora?...a buscar un nuevo objetivo. La pena, que a veces desperdiciamos los pequeños diamantes que encontramos hasta llegar a conseguir la preciada joya.
Saludos
Gracias de nuevo Lucía.
La verdad es que al leer tus elogios, en cierta forma quisiera haber escrito las cosas que escribo para que fueran elogiadas :-D. La realidad (espero no engañarme a mí mismo), es que esto sólo intenta ser un diario para mí, en el que cuento cosas que no me importa que la gente lea. Si además la gente lo lee y pasa un rato agradable, como decía aquel profesor al que alguna vez he aludido, miel sobre hojuelas.
En cuanto a tu blog, anímate y empieza que estoy haciendo limpieza en mis blogs favoritos y me encantará tener el tuyo ;-).
Por cierto, no me creo eso de que no te animas a escribir. Ya lo has hecho poniendo un par de comentarios en blogs ajenos, ¿cuál es la diferencia? ¿la "obligación" de escribir algo cada día?. Escribe cuando quieras, cuando te apetezca, dos veces al día, dos al mes, dos folios, dos líneas ... si es para ti te dará igual, o casi igual. Además te acostumbrarás como se acostumbran los de Gran Hermano a las cámaras (vamos digo yo, porque nunca he visto el programa).
Cuídate.
Un saludo, Domingo.
Domingo:
Yo también soy donante de sangre.
Saludos
Perspectiva ante la vida es haberse forjado unas ideas mas o menos claros de como somos y queremos ser, de haber cometido errores menores (los mayores esperamos nunca lleguen) pero interviene en esto el ambiente cultural en el que te desenvuelves que ayuda a identificar y configurar nuestra personalidad. Estamos dentro de un tren que no se detiene pero cambia de estaciones, para mi la vida es ir dentro de ese tren cercanías con mis cuadernos escuchando la musica clásica que te ayuda a reflexionar. Ves a gente subir y a otra bajar. El peligro es no encontrar nunca tu sitio, estar dentro de un tren que va rumbo a ninguna parte, que sientes que vives en un lugar al que no perteneces, que el paisaje no lo reconoces como tuyo. Sentirse desubicado dentro de tu propio país. Ser un mero observador del paso de las estaciones.
Tengo 28 años y he de decir que es ahora cuando empiezo a conocer más lo que soy aunque siempre tenemos dudas en algunos campos. Creo que es la edad en la empiezas a buscar autenticidad a tu vida. Y a tener "memoria histórica". Antes solías hacer lo que los demás, leer lo que te mandaban y seguir la música que te daba masticada la radio. Empiezas a sentirte solo porque empiezas a ser tu mismo.
La ciudad es un parque de atracciones en el que tienes que pagar siempre un peaje por vivir.
No, Lucía, el problema es que hoy no existe ese "ya está". Tu piso puede cambiar muchas veces y sobre como has conseguido tu coche pues es asunto de cada uno. El problema es que la gente se contenta rápidamente con un televisor en color y un viaje a Tenerife. La vida es algo más que eso.
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