Como en los "estates"
En unos meses hará dos años que estuve en EEUU. Madre mía, ¡cómo pasa el tiempo!. Y como comentaba en la entrada anterior, algunas cosas han cambiado, muchas de hecho. Otras en cambio siguen iguales. Pero no son éstas últimas de las que quiero hablar, sino de las primeras, las cosas que han cambiado. Y esta vez, al revés que en la anterior entrada, no hablaré de mí mismo. O no tanto :-).
Llegué a los EEUU, comprobé que P.D. no había ido a buscarme como prometió y cogí un taxi para el 440 de Wabash Av. Allí, en la 4203, estaba mi apartamento, apartamento que pudo ser mío por sólo 50Kilitos, una auténtica ganga, la verdad, para el apartamento y la zona en la que estaba. En fin, más nos valdrá que nos centremos. Allí en el salón había un típico (después en las películas he podido ver que es típico) mueble que al abrirse mostraba la televisión. Y es esa misma televisión la que de vez en cuando yo veía. Aunque veía poca, alguna serie o película podía caer de vez en cuando.
Un programa que sí veía con más asiduidad, era el programa de Howard Stern, http://en.wikipedia.org/wiki/Howard_Stern , un tipo al que solían ( e imagino que suelen) multar por el contenido del programa o por sus comentarios. El show era generalmente divertido y, de forma muy habitual, invitaba a chicas impresionantes. Recuerdo que una vez invitó a tres actrices porno que participaron en un concurso :-O. Cada media hora tenían que beber una cierta cantidad de líquido y ganaba la que aguantase más sin ir al baño. Participó también un tipo (el único chico concursante) del programa que llegó a la final si mal no recuerdo.
Había también otra sección en la que otro de los colaboradores del programa se medía en una prueba de cultura general a una pareja. Mejor dicho, competía al hombre y si le ganaba, la chica se tenía que desnudar en público. De las tres o cuatro veces que pusieron la sección, no lo vi nunca perder. Eso sí, por supuesto las escenas de los desnudos estaban convenientemente pixeladas para que no se viera nada. Pero ya se sabe cómo son allí para esas cosas.
Y una vez hemos paseado por un programa estrella en la televisión americana, llegamos al meollo del asunto, la evolución de nuestra tele. Empecemos por la publicidad. La publicidad allí hace palidecer a la de nuestras cadenas pero por mucho. Entre otras cosas, las películas las "recortan" para emitirlas en televisión para acomodarlas al poco tiempo que la publicidad les deja (y algún mal pensado dice también que para quitar alguna escena subida de tono que pueda haber).
Por otro lado, la publicidad es como ya sabemos, mucho más directa que la nuestra. Arremete contra la competencia sin problemas. Tómate las pastillas A que te curan en 1 semana en vez de en un mes que es lo que tardan las pastillas B. Desde hace unos años, también tenemos nosotros a las compañías de zumos restregándose su porcentaje de zumo y cosas por el estilo, pero no es lo mismo.
Y además existía allí otro tipo de anuncios que aquí no estábamos acostumbrados a ver, anuncios para los que tenían líneas de crédito bajas, problemas con los bancos, problemas en sus negocios etc. Muchas veces era el abogado de turno el que aparecía en tv con un ... "Soy experto en declaraciones en quiebra, si necesitas declararte en quiebra, llámame" y cosas por el estilo.
Todo eso está llegando a nosotros. Ahora no sólo tenemos las empresas que te "prestan" 3000 euros en un periquete por un módico interés del veintitantos por ciento. Ahora además tenemos empresas que reunifican todas tus deudas en una sola. Y te ahorran lo más grande, casi que asumen tu deuda y te pagan por ello. Ese tipo de anuncios no estaba aquí cuando yo fui, o al menos yo no lo había visto.
Y por último, los programas. Allí pude experimentar en mis propias carnes lo que son los reality shows. Un reality show no es un programa al que gente de dudosas entendederas van para contarles a quien quiera oírlos que el novio o la novia los ha engañado y lo saben pero que quieren perdonarles o darles viento o ... No, allí reality es REALITY. Recuerdo una tarde en el gimnasio uno de esos programas, lo que no recuerdo es el nombre. Básicamente, la gente que quería una operación de cirugía estética iba y el programa se la pagaba, eso sí, emitiendo pormenorizadamente el antes, el durante y el después y mostrando cómo con dinero y bisturí se puede hacer de una persona, dos totalmente diferentes.
Estaban también los programas que mostraban la vida de alguien. Uno de los que tenía más fama era el programa de Ashlee Simpson. Cantante y a su vez hermana de la cantante Jessica Simpson. Podías verla haciendo lo que habitualmente hacía, camino de convertirse en una gran Pop-star. No sé si vi un episodio donde daba su primer concierto. Otra parecida era la hija de Hulk Hogan, que sin que su padre tuviera que mover ni un músculo, empezaba su carrera musical.
Caso aparte merecen los "Operación triunfo". Allí el programa era "American Idol" y creo que no llegué a verlo ninguna vez. Pero haciendo zapping sí llegué a ver:
En fin, que podías ver de todo. Igual que ahora aquí. Famosos bailando, famosos cantando, famosos cocinando ... me cabe la duda de si esos programas ya habrán salido allí, pero sea la respuesta positiva o negativa, lo innegable es que el reality show nos ha conquistado, o al menos ha conquistado nuestra tele. Y quizás es por eso por lo que cada vez veo menos.
Finalizo con un par de enlaces relacionados que quizás puedan complementar mi información:
http://www.lavox.com/protagonista/03-17-2003.php
http://166.114.28.115/20050730/mundo/mundo01.htm
Un saludo, Domingo.
Llegué a los EEUU, comprobé que P.D. no había ido a buscarme como prometió y cogí un taxi para el 440 de Wabash Av. Allí, en la 4203, estaba mi apartamento, apartamento que pudo ser mío por sólo 50Kilitos, una auténtica ganga, la verdad, para el apartamento y la zona en la que estaba. En fin, más nos valdrá que nos centremos. Allí en el salón había un típico (después en las películas he podido ver que es típico) mueble que al abrirse mostraba la televisión. Y es esa misma televisión la que de vez en cuando yo veía. Aunque veía poca, alguna serie o película podía caer de vez en cuando.
Un programa que sí veía con más asiduidad, era el programa de Howard Stern, http://en.wikipedia.org/wiki/Howard_Stern , un tipo al que solían ( e imagino que suelen) multar por el contenido del programa o por sus comentarios. El show era generalmente divertido y, de forma muy habitual, invitaba a chicas impresionantes. Recuerdo que una vez invitó a tres actrices porno que participaron en un concurso :-O. Cada media hora tenían que beber una cierta cantidad de líquido y ganaba la que aguantase más sin ir al baño. Participó también un tipo (el único chico concursante) del programa que llegó a la final si mal no recuerdo.
Había también otra sección en la que otro de los colaboradores del programa se medía en una prueba de cultura general a una pareja. Mejor dicho, competía al hombre y si le ganaba, la chica se tenía que desnudar en público. De las tres o cuatro veces que pusieron la sección, no lo vi nunca perder. Eso sí, por supuesto las escenas de los desnudos estaban convenientemente pixeladas para que no se viera nada. Pero ya se sabe cómo son allí para esas cosas.
Y una vez hemos paseado por un programa estrella en la televisión americana, llegamos al meollo del asunto, la evolución de nuestra tele. Empecemos por la publicidad. La publicidad allí hace palidecer a la de nuestras cadenas pero por mucho. Entre otras cosas, las películas las "recortan" para emitirlas en televisión para acomodarlas al poco tiempo que la publicidad les deja (y algún mal pensado dice también que para quitar alguna escena subida de tono que pueda haber).
Por otro lado, la publicidad es como ya sabemos, mucho más directa que la nuestra. Arremete contra la competencia sin problemas. Tómate las pastillas A que te curan en 1 semana en vez de en un mes que es lo que tardan las pastillas B. Desde hace unos años, también tenemos nosotros a las compañías de zumos restregándose su porcentaje de zumo y cosas por el estilo, pero no es lo mismo.
Y además existía allí otro tipo de anuncios que aquí no estábamos acostumbrados a ver, anuncios para los que tenían líneas de crédito bajas, problemas con los bancos, problemas en sus negocios etc. Muchas veces era el abogado de turno el que aparecía en tv con un ... "Soy experto en declaraciones en quiebra, si necesitas declararte en quiebra, llámame" y cosas por el estilo.
Todo eso está llegando a nosotros. Ahora no sólo tenemos las empresas que te "prestan" 3000 euros en un periquete por un módico interés del veintitantos por ciento. Ahora además tenemos empresas que reunifican todas tus deudas en una sola. Y te ahorran lo más grande, casi que asumen tu deuda y te pagan por ello. Ese tipo de anuncios no estaba aquí cuando yo fui, o al menos yo no lo había visto.
Y por último, los programas. Allí pude experimentar en mis propias carnes lo que son los reality shows. Un reality show no es un programa al que gente de dudosas entendederas van para contarles a quien quiera oírlos que el novio o la novia los ha engañado y lo saben pero que quieren perdonarles o darles viento o ... No, allí reality es REALITY. Recuerdo una tarde en el gimnasio uno de esos programas, lo que no recuerdo es el nombre. Básicamente, la gente que quería una operación de cirugía estética iba y el programa se la pagaba, eso sí, emitiendo pormenorizadamente el antes, el durante y el después y mostrando cómo con dinero y bisturí se puede hacer de una persona, dos totalmente diferentes.
Estaban también los programas que mostraban la vida de alguien. Uno de los que tenía más fama era el programa de Ashlee Simpson. Cantante y a su vez hermana de la cantante Jessica Simpson. Podías verla haciendo lo que habitualmente hacía, camino de convertirse en una gran Pop-star. No sé si vi un episodio donde daba su primer concierto. Otra parecida era la hija de Hulk Hogan, que sin que su padre tuviera que mover ni un músculo, empezaba su carrera musical.
Caso aparte merecen los "Operación triunfo". Allí el programa era "American Idol" y creo que no llegué a verlo ninguna vez. Pero haciendo zapping sí llegué a ver:
- "Fear Factor", que si mal no recuerdo intentó copiar Antena 3 (¿Factor Miedo?)con escaso éxito. El programa era en parte tipo "Endurance", haciendo pasar a la gente por circunstancias asquerosas o agobiantes según el caso. Eso sí, el programa se grababa en Las Vegas y las pruebas de altura mostraban unas panorámicas increíbles.
- Un gran hermano de famosos donde no me quedó muy claro si Brigitte Nielsen se había acostado con un afro-americano al que programas más tarde humillaba abofeteándolo como en broma. Por cierto que el éxito de estos gran hermanos dependían en gran parte de que los concursantes se liaran entre sí (¿qué raro, no?) y como se iban a liar y además de forma explícita, ya venían de casa con un presupuesto para el pixelado posterior de las imágenes.
- The Bachelor. Un tipo, generalmente bien posicionado, recibía a una serie de chicas (que lo querían por lo que era, no por lo que tenía). Las aspirantes tenían que ganarse no sólo al hombre, sino también a sus hijas que solían ser un duro escollo. Al final se suponía que se casaban.
- The apprentice. Presentado por el multi-millonario Donald Trump, en uno de sus casinos de Las Vegas, el objetivo era demostrar que se era un crack de los negocios, y el premio, llegar a ser presidente, o vicepresidente de alguna de las empresas Trump.
En fin, que podías ver de todo. Igual que ahora aquí. Famosos bailando, famosos cantando, famosos cocinando ... me cabe la duda de si esos programas ya habrán salido allí, pero sea la respuesta positiva o negativa, lo innegable es que el reality show nos ha conquistado, o al menos ha conquistado nuestra tele. Y quizás es por eso por lo que cada vez veo menos.
Finalizo con un par de enlaces relacionados que quizás puedan complementar mi información:
http://www.lavox.com/protagonista/03-17-2003.php
http://166.114.28.115/20050730/mundo/mundo01.htm
Un saludo, Domingo.
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