sábado, diciembre 31, 2005

31/12/2005

¿Qué tal la noche, vieja?. Eso podría preguntarle mañana Alfredo di Stéfano a su inseparable amiga la pelota. Saco esto a colación pues es un juego de palabras de esos a los que tan aficionado soy, es tema de actualidad la situación médica de "La saeta rubia" y además hará dos o tres años le regalé a mi padre el libro con su biografía. Probablemente recuerde mal, pero me suena que el título del libro podría ser "Gracias, vieja". Dudo que lo haya leído y si acaso lo habrá ojeado un par de veces.

Se trata de uno de los pocos regalos que yo he hecho a mi padre, pues en mi casa no solemos regalarnos nada por Navidad o Reyes. Quizás por pertenecer a una familia de éstas típicas en las que nunca faltó de nada, pero tampoco sobró. Quizás porque simplemente no es la costumbre. Que no era la costumbre, lo intuí:

Lo intuí aquel día
En el que forcé mi alcancía
Con premeditación y alevosía,
De la forma más arpía.

De una hucha de hojalata,
De un modo sutil y artero,
Sustraje mi propio dinero,
Para comprar unas alhajas,

Y me llevé una imprecación,
Por las artes que no la intención,
Por no pedir y actuar cual ladrón,
Por sucumbir al impulso tentador,
Por agasajar a procreadora y procreador,
Con una postal y un destornillador.

Lo intuí aquel día con, 8,9, quizás 10 años, no sé. Aunque bueno, en su crédito está que no volví a abrir la hucha para sacar unas cuantas monedas. Eso sí, tampoco les he pedido dinero, sobre todo desde que existe la tarjeta de crédito y los cajeros jejeje.

La verdad es que no tenía pensado contar nada, en particular contar esto. Simplemente quería dejar una felicitación, rápida felicitación de cortesía a quien pueda leer esto que no en vano estamos a unas pocas horas de que el reloj de nuestras vidas se acelere un poquito en esta etapa volante que denominamos Nochevieja 2005.

Unas horas quedan para que yo me empiece a equivocar al poner la fecha y siga dejando 2005 en vez de 2006. Un mes aproximadamente durará la confusión. Ya me pasaba de pequeño, y bueno, no sé si es algo común entre la gente, lo que está claro es que en mi caso ya viene de lejos.

Unas horas en las que voy a hacer poco, así que para compensar, aprovecharé los minutos que voy a estar aquí sentado para hacer mi resumen del año 2005. Un rápido resumen como por otra parte bien indica la palabra resumen.

En general el 2005 no ha estado mal, ha habido de todo un poco, bueno y menos bueno pero nada excesivamente malo. A final de año todo se ha concentrado en el trabajo, mucho y variado. Prácticamente no he hecho otra cosa, aparte de firmar la hipoteca y demás. He perdido la forma física y los sábados en vez de trotar de forma pesada por el campo de fútbol ya directamente me arrastro. A pesar de todo es positivo que todavía pueda ir y venir en bici, y arrastrarme en medio.

Ya he hablado un poco del resto de cosas, en particular de la hipoteca. Ha sido sin duda una de las cosas positivas del año, aunque a toro pasado veo muchas cosas que podía haber hecho mejor, pero por un lado la inexperiencia, y por otro la falta de consejo han hecho que las cosas hayan salido tal como tenían que salir, que por otro lado tampoco está tan mal.

Y quedan las cosas importantes de la vida, la familia, los temas sentimentales y el Hattrick :-D. La familia bien, gracias. Los temas sentimentales no demasiado bien, pero quizás al final del año hayan sido los que más cosas me han enseñado de mí, lo cual siempre es de agradecer. Y por supuesto lo importante de verdad, el Hattrick, impresionante. Dos ascensos y un tercer puesto en la primera temporada en VI. Un laterales magníficos, un medio centro y un delantero brillantes, récord de estrellas, de dinero recibido por jugador, mejoras del equipo en todas sus líneas y perspectivas geniales de futuro. En un par de temporadas creo yo que estaremos luchando por llegar a V división con los pesos pesados del grupo.

Bueno, pues eso es todo. Feliz año, y besos y abrazos, según corresponda. A Giovanni, por supuesto, ambos :-P.

Un saludo, Domingo.