¿Escribo hoy?
Me he pasado el día, mejor dicho la tarde, escribiendo correos y haciendo unas cosillas para un proyecto del que puede que hable dentro de poco. Se trata de un proyecto interesante en el que intentaré participar dentro de lo posible, aunque probablemente sólo pueda aportar mi experiencia y mis ideas. Me he pasado la tarde escribiendo, prácticamente igual que me he pasado la semana. Estas últimas semanas están siendo un cúmulo de pruebas y más pruebas y errores y más errores y confusiones y arreglos que arreglan cosas y estropean otras y "conference calls" y bueno ... todo lo relacionado con el mundo de la informática; pero cada cosa con su correo correspondiente por supuesto.
El martes sin ir más lejos creo que escribí veintitantos correos a lo largo del día. Al día siguiente, cuando el astro rey da las últimas boqueadas y te anuncia que tu hora de salir del trabajo se aproxima, había mandado cinco o seis como mucho. Al final salí tarde de nuevo y algo me recuperé. O quizás es al revés, tuve que escribir varios correos y por eso salí tarde de nuevo.
La verdad es que no lo sé, por mi forma de escribir, leo y releo lo escrito. Lo repaso, lo arreglo, lo complemento y al final, harto ya de encontrarle fallos, lo envío. Es muy parecido en mi casa, con un correo o con una entrada en el diario. Un texto mínimo ... una media hora, si ya uno empieza a gustarse, los tres cuartos o la hora no se lo quita nadie. Por este motivo me encuentro discutiendo conmigo mismo. He aquí el diálogo de besugos:
El martes sin ir más lejos creo que escribí veintitantos correos a lo largo del día. Al día siguiente, cuando el astro rey da las últimas boqueadas y te anuncia que tu hora de salir del trabajo se aproxima, había mandado cinco o seis como mucho. Al final salí tarde de nuevo y algo me recuperé. O quizás es al revés, tuve que escribir varios correos y por eso salí tarde de nuevo.
La verdad es que no lo sé, por mi forma de escribir, leo y releo lo escrito. Lo repaso, lo arreglo, lo complemento y al final, harto ya de encontrarle fallos, lo envío. Es muy parecido en mi casa, con un correo o con una entrada en el diario. Un texto mínimo ... una media hora, si ya uno empieza a gustarse, los tres cuartos o la hora no se lo quita nadie. Por este motivo me encuentro discutiendo conmigo mismo. He aquí el diálogo de besugos:
- Ya es tarde, tendrías que acostarte a descansar que mañana tienes varias cosas que hacer, incluido coger la espátula y liarte a quitar trozos de pintura ahuecada de la pared. ¿Escribo en el diario o no?. Total si casi nadie se va a dar cuenta.
- ¿Y ahora te vas a poner a escribir? Mira que vas a acabar a las tantas.
- No, hoy prometo que será rápido. Copio, pego en el Word por si hay alguna falta de ortografía y sin releer ni nada.
- Anda ya, tú estás loco, vete a dormir que es lo que te hace falta.
- Tienes razón, mejor escribo mañana.
posted by Domingo at 11/26/2005 11:55:00 p. m.
1 Comments:
Escribe hoy y escribe siempre. No te preocupes en corregir tus textos, que para una que no entiende mucho,están perfectos y sin errores.
Yo no suelo detenerme mucho en lo que escribo , porque si lo hago, seguro que lo elimino inmediatamente. Sé que cometo mil errores y eso me frena un poco....
Ahora que lo pienso, me siento muy orgullosa de que te atrevas a visitar mi blog con la burradas que cometo.
Un abrazo
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